30 junio, 2022
Una dentición sana y funcional es importante en todas las fases de la vida, al permitir funciones esenciales humanas tales como el habla, la sonrisa, la socialización o el comer. Las enfermedades bucodentales afectan a un área limitada del cuerpo humano pero sus consecuencias e impacto afectan al cuerpo de manera global. Una boca sana y un cuerpo sano van de la mano. Por el contrario, una mala salud bucodental puede tener consecuencias desfavorables en el bienestar físico y psicosocial.
Las enfermedades orales – dentales son muchas veces invisibles y ocultas o han sido aceptadas como una consecuencia inevitable de la vida y el envejecimiento. Sin embargo, existe una clara evidencia de que este tipo de enfermedades no son inevitables, sino que pueden ser reducidas o prevenidas a través de métodos sencillos y efectivos, en todas las etapas de la vida.
En esta nota hablaremos de una etapa muy especial en las mujeres como lo es el embarazo, las consecuencias negativas de una mala higiene y salud oral-dental, tanto para la madre como para su bebé, así como las recomendaciones y cuidados necesarios más importantes durante esta etapa.
El establecimiento de una adecuada salud dental oral debe ser buscada rigurosamente siempre, lo cual deja clara la importancia de motivar a las pacientes durante las visitas al consultorio.
Se debe atender a la gestante con comprensión, que se aclaren todas las dudas y que se le permita entender los procedimientos a realizar, brindándole la información necesaria para que de este modo la visita al dentista sea más grata y deseable.
Existe desinformación en las gestantes sobre la importancia de la salud dental – oral durante este periodo, pero está demostrado que son receptivas ante la información que se les brinda para promover de manera exitosa una adecuada salud bucodental.
La administración de medicamentos debe limitarse durante el embarazo y la lactancia, sin embargo, cuando la paciente presenta dolor o infección debe valorarse el riesgo – beneficio del empleo de fármacos que ayuden a estabilizar el estado de salud oral de la paciente, disminuyendo el estrés físico y mental de la misma.
Son muchos los estudios que sugieren que las infecciones orales son posibles factores que contribuyen a una variedad de enfermedades sistémicas de importancia clínica como la endocarditis infecciosa que es una seria y con frecuencia fatal enfermedad, que se ha asociado con infecciones dentales y su tratamiento, del mismo modo los problemas cardiovasculares y la diabetes mellitus también asociados con infecciones orales.
El paracetamol (Acetaminofén) es el medicamento de elección para el control y alivio de dolor siempre y cuando se emplee a dosis terapéuticas.
El uso de AINEs (antinflamatorios no esteroideos) en general se considera seguro en el embarazo, siempre y cuando sea en pequeñas dosis, de manera intermitente y que se suspenda de seis a ocho semanas antes del término.
Los anestésicos locales, así como la epinefrina son de uso seguro durante el embarazo. No existen casos documentados de efectos adversos asociados a los anestésicos locales durante el embarazo cuando se utilizan en dosis adecuadas.
¡Hasta la próxima!
Dr. Jorge Lara
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